Inclusión desde la infancia: la importancia de la diversidad en colegios

Aceptar la diversidad y mejorar la inclusión desde la infancia es clave para mejorar el entorno social. Hay tres claves que se tienen que dar desde edades tempranas para asegurar que esto ocurra y que la inclusión se trabaje en ambas direcciones.

Garantizar la inclusión, la aceptación de la diversidad como normalidad y una mejora social desde la infancia son totalmente vitales para tener adolescentes y adultos adaptados al entorno laboral y social.

Para unos adultos independientes, es necesario educar a los niños de capacidades diversas con independencia y autodeterminación. Todos los niños tienen derecho a una correcta educación en un sistema regulado, en igualdad de condiciones, recibiendo el apoyo adecuado para que puedan ir adquiriendo conocimientos a su ritmo y de acuerdo con sus capacidades.

Beneficios de la inclusión social desde la infancia

La inclusión social desde la infancia en las escuelas beneficia a todos. Los niños sin discapacidad intelectual podrán aprender el valor de la inclusión y el respeto, interactuando con sus compañeros con discapacidad intelectual como iguales y como miembros del mismo grupo.

¿Cómo mejorar la inclusión social desde la infancia?

¿Cómo se puede mejorar en este aspecto? Los profesionales del sector hablan de la metodología de la inclusión.

Esto es que cada alumno pueda incluirse en el sistema educativo formal y reciba los conocimientos en igualdad de condiciones para que en el futuro pueda participar de manera activa en la sociedad.

Implementar estrategias inclusivas vital para evitar que grupos vulnerables sean aislados o tengan pocas posibilidades de crecer a nivel personal y profesional. Cuando en las escuelas primarias existe la inclusión, se construyen sociedades llenas de oportunidades para todos, con un grado de bienestar muy alto.